jueves, 6 de marzo de 2014

Ni tanto ni tan poco.

coomic 028 Comic | Las madres y las redes sociales

En ésta viñeta podemos observar como ha sido la evolución que se ha dado en algunas de las nuevas generaciones de padres que viven en las redes sociales y que algunos ejercen prácticamente un espionaje sobre sus hijos. En el otro lado se encuentra el padre/o madre que no usa las redes sociales activamente.

Entre estos dos perfiles, que están caracterizados por su completa oposición, existe un equilibrio que trataría de limitar los peligros en la red sin llegar a entrometerse en la vida social de sus hijos y dándoles ciertas libertades dentro de dichas redes, vigilando la existencia de los curiosos, mentirosos e incluso extorsionadores.

Tras ésta opinión personal desde Los Anónimos queremos proponeros un debate entre ambas posturas o incluso un punto intermedio según vuestro criterio, por lo tanto, ¿se debe desconocer la vida y los peligros de internet para nuestros hijos hasta tal punto que no se les eduque en los peligros de las redes sociales o se debe controlar y casi espiar hasta que vigilemos cada letra que se escribe por ellos o sobre ellos?

18 comentarios:

  1. Me ha parecido muy interesante este tema de debate, ya que es una de las preguntas mas comunes que suelen preguntarse padres y madres de las familias. Debemos tener siempre en cuenta que las nuevas tecnologías están presentes en todos nuestros ámbitos, y que por el momento, no podríamos vivir sin ellas, por lo que debemos adaptarnos lo antes posible. A lo largo de las renovaciones de la tecnología, hemos ido viendo que cada día hay mas tecnología, necesaria sobre todo para la comunicación y la búsqueda de información. Sí es cierto que corremos el riesgo de una mala interpretación de la información, del acceso a páginas web inadecuadas o de la mala utilización de ésta, pero lo que debemos tener claro es que la tecnología es algo que ya vive en nosotros, por lo que nunca nos podremos deshacer de ella. Es algo normal que los padres y madres tengan cierta inseguridad con los conceptos que pueden adoptar sus hijos sobre temas concretos en Internet, además de que una de cada 4 personas tienen problemas relacionados con el abuso de las nuevas tecnologías, pero pienso que la solución no está en el espionaje hacia sus hijos, sino que todo girará en torno a la educación que los niños hayan recibido de sus padres y madres.

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  2. En la actual realidad de nuestras vidas se encuentran muy presentes las nuevas tecnologías, las cuales nos proporcionan numerosas ventajas y, a su vez, diversos problemas que se acentúan con su mal uso. Para conseguir una buena educación tecnológica es necesario que tanto padres como maestros formen una coalición. Los maestros deben de mostrar a su alumnado los peligros que presentan las TIC, además de apoyarles a que realicen un buen empleo de ellas, y las familias deben de reforzar esta postura. Por lo tanto, ninguna de las actitudes planteadas por mis compañeros es la acertada. Por una parte si los padres desconocen la vida online de sus hijos y los peligros que se les pueden presentar en internet, puede que estos los experimenten sin conocimiento de que esa situación es negativa o perjudicial. Por otro lado, controlar y casi espiar cada letra que se escribe por ellos o sobre ellos tampoco es conveniente, puesto que existen diversas formas de ocultar la información que puede ser visible a nuestros contactos, además desde la prohibición no se ha conseguido nunca nada, sino que el diálogo y la comprensión es el punto de partida para conseguir un objetivo. En este caso el objetivo de los padres es que sus criaturas no experimenten los posibles peligros de internet, ya que llevarán a cabo un buen uso de este recurso con su ayuda.

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  3. Respondiendo a la cuestión que han planteado mis compañeros mi opinión no es favorable para ninguna de las dos posiciones, ya que ambas son extremas, por tanto creo que la posición correcta de los padres sería estar al tanto de ciertos peligros que tienen las redes sociales e internet en sí y así poder transmitirselo a sus hijos de manera educativa para que ellos sepan valorar lo que está bien y lo que no, sin así tener que ejercer de vigilantes. Porque si se ejerce de vigilantes se invadiría por completo la intimidad de los hijos y así ellos tendrían cierta desconfianza hacia sus padres. Esta desconfianza no se podría aceptar si los padres son coherentes, hay que mantener un cierto margen con los hijos dejandoles libertad, ya que de los errores también se aprende, y así si surgiese algún problema lo podrían solucionar por ellos mismos o comentarselo a sus padres para que entre ambos el fin de dicho problema sea resuelto satisfactoriamente. Ante todo hay que respetarse y confiar los unos en los otros.

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  4. El tiempo avanza y, obviamente, las cosas van cambiando. En los últimos años las tecnologías han ejercido un papel muy influyente e importante en nuestras vidas, provocando que todos estemos “conectados” y comunicados los unos con los otro.
    Esta conexión, además de presentar ventajas, también lleva ligada una serie de peligros. Entre ellos, uno de los que más se ha incrementado en los últimos años es el ciberacoso. Los que más están expuestos a los peligros de la red, son los más pequeños. “Los Anónimos” plantean la cuestión de si los padres deben controlar el uso que sus hijos hacen de internet y, sobre todo, de las redes sociales, o bien deben si deben desconocerla. En respuesta a esta pregunta, considero que los padres deben adoptar una posición intermedia, es decir, no deben de pasar de lo que hacen sus hijos con internet, pero tampoco deben estar encima de ellos controlando lo que hacen a cada minuto.
    Desde mi punto de vista, lo que deberían de hacer es tener, antes de instalarles internet en el móvil o en casa, una charla con ellos advirtiéndoles de los riesgos que se pueden encontrar para que así sean conscientes del uso que deben de darle. Después de esta charla, lo ideal sería proponerles unos horarios de uso y determinar, de esta forma, cuánto tiempo y qué días lo van a emplear.
    En resumen, considero que los padres no deben de pasar de lo que sus hijos hagan en internet pero tampoco deben controlarlos de forma excesiva. Una posición intermedia sería la mejor medida para prevenir los peligros que corren los más pequeños en el uso de las TIC.

    Carmen Pérez Valcárcel

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  5. El tema que se plantea en la viñeta me parece muy interesante ya que, se presenta de una forma muy extremista. No creo que los padres deban estar encima de sus hijos hasta el punto de espiar o controlar sus conversaciones. Pienso que las cosas se tienen que hacerse con moderación. No es bueno dejar que los niños naveguen por las páginas que quieran, porque como sabemos Internet tiene mucha información buena que puede ser muy útil para que aprendan o juegos para que se diviertan pero también contiene información mala, es decir errónea, además los niños por accidente pueden entrar en páginas que no son recomendadas para su edad e incluso según los casos pueden sufrir acoso mediante cualquier chat. Por todo lo anteriormente dicho yo creo que es conveniente que los padres de vez en cuando echen un vistazo a sus hijos y vean en que páginas están metidos o que están haciendo, u otra opción es que cada noche miren en el buscador las últimas páginas en las que se ha entrado desde el ordenador. Así estarán tranquilos y no violaran la intimidad de los niños, que aunque sean pequeños tienen derecho a tenerla en su tiempo de ocio.

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  6. En mi opinión, ambas posturas, la de tener un control excesivo sobre la vida de nuestros hijos en las redes sociales o la de no interesarse en absoluto, son negativas.
    Por una parte las madres y los padres de niños menores deben controlar y tener conocimiento de los movimientos que sus hijos realizan en internet o con las nuevas tecnologías, para evitar posibles incidentes con estas. Además deben informar sobre los peligros que pueden generar la red y un mal uso de esta. Hay que poner especial ímpetu en el tema de las redes sociales considerando que los padres han de tener acceso a la información que sus hijos/as cuelguen siempre y cuando se respete la intimidad y la vida privada de estos.
    Por otra parte el desinterés por saber y conocer lo que los niños y niñas ven o hacen en las redes sociales puede generar diversos problemas a los menores, ya sea de índole personal, social… sin que las madres y los padres tengan consciencia de ello, ocasionando daños muchas veces irreversibles en la vida de los niños y niñas.

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  7. Está claro que con la introducción de las TIC en el ámbito social, la sociedad ha pegado un gran giro. Sin duda cuenta con aspectos positivos y negativos.

    A nivel general, positivos porque permite acceder a todo tipo de información y mantener un contacto globalizado; y negativos porque pueden resultar peligrosos para los más pequeños debido al mal uso de las redes sociales, adicción a los videojuegos, y la pérdida de la libertad, ya que en la red todo es público y cualquier persona puede acceder a tu información personal.

    Como decía Einstein: “Temo el día en qué la tecnología sobrepase la humanidad” El mundo solo tendrá una generación de idiotas. Desde mi punto de vista, refiriéndose al mal y excesivo uso de las nuevas tecnologías.

    Sin duda, son algo muy positivo e innovador, pero hay que hacer un uso responsable y consecuente de éstas. No se puede robotizar la sociedad, somos humanos y también tenemos que estar en contacto con la naturaleza.

    En lo referido al interrogante planteado, creo que no se debe educar desde ninguno de los dos extremos. Pues la pérdida de la libertad es un inconveniente como ya se citó anteriormente, es necesario que los más pequeños se sientan seguros y en confianza, sin sentirse espiados, pues todos tenemos nuestra intimidad. Pero está claro que hay que mostrarles los riegos que las nuevas tecnologías presentan para que sean conscientes de éstos y observar el uso que hacen de éstas, educándolos para que hagan un buen uso de las mismas.

    Naiara López Gómez.

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  8. Respondiendo a la cuestión que han plateado mis compañeros, ninguna de las posturas es válida ya que ambas llegan a un extremo que no es aconsejable.
    Los padres no deben pasar de la vida de sus hijos en ningún aspecto pero tampoco es necesario acosarles. La postura correcta sería estar al tanto del manejo que sus hijos hacen de internet advirtiendoles de los peligros que existen por las redes sociales o las páginas web para que después ellos sean capaces de llevar a cabo su propio juicio crítico sin necesidad de tener un vigilante.
    Uxía Gómez Bello

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  9. Muy interesante la pregunta que planteáis. Pienso, que ambas las dos opciones son demasiado extremistas, pues no se trata de, o pasar totalmente de los hijos y que estos naveguen libremente por Internet, o vigilarlos como si fuéramos los EEUU.
    Hoy en día en la que son tantos los peligros que hay en Internet, pero a la vez, de no estar en las redes, son tantas las cosas que se pueden perder, que es difícil, y más por parte de los padres, conocer todo ello.
    Por consiguiente, encontrar un punto intermedio entre las dos opciones sería lo óptimo, pero en la práctica encontramos muy pocos casos en los que se cumplan, pues el patrón que más se repite es el del desconocimiento por parte de los progenitores.

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  10. En cuanto a la pregunta que plantean “Los Anónimos” yo me sitúo en una posición intermedia. Creo no es necesario que los padres hagan un control excesivo en el uso de las Nuevas Tecnologías, sin embargo deben influenciar a que sus hijos no hagan un uso inadecuado de ellas que los lleven a situaciones de riesgo. Es necesario que estén informados de todo aquello que ocurre por la red pero sin presionar a sus hijos y agobiarles todo el tiempo. Los padres deben conocer los peligros que se esconcen tras la red y mantener asimismo informados a sus hijos, para que éstos adopten una actitud alerta en todo momento. Los abusos por la red son cada vez más frecuentes. Cada día miles de niños y adolescentes sufren abusos por la red, por parte de personas que se hacen pasar pos amigos de la red, seguidores en las redes sociales…Esto provoca que muchos jóvenes puedan caer en las trampas de este tipo de personas. Es por ello que lo más recomendable es que los padres sepan que sus hijos están usando de forma segura Internet.
    Si bien es cierto, las tecnologías de la información y comunicación se han convertido en una herramienta indispensable en nuestra vida diaria. Es necesario, por esa razón, hacer un buen uso de ellas como recursos integradores en nuestra formación, así como también como herramientas de ocio. Sin embargo debemos adoptar una posición alerta, a través de un comportamiento neutro e ignorando aquello que se desconozcamos. Convendría por ejemplo rechazar invitaciones en las redes sociales de personas que desconozcamos, ignorar muchas invitaciones que nos mandan a través del correo electrónico, revisar frecuentemente el correo electrónico y rechazar aquello que desconozcamos…
    En definitiva es necesario que tanto padres e hijos se mantengan al tanto de lo que ocurre en la Red. Los padres deben informar y mantener alerta a sus hijos de lo que ocurre, pero sin emplear un excesivo control.

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  11. En mi opinión, las dos opciones de la viñeta me parecen extremistas. Como diríamos popularmente: "Nin tanto nin tan pouco".

    No me parece necesario que los padres lleguen al punto de no respetar la privacidad de sus hijos vigilando sus móviles, ordenadores... Para ello es necesario que estén informados de los puntos positivos y negativos que tienen las nuevas tecnologías. Al tener esta información podrán aconsejar a sus hijos sin tener que llegar a extremos como espiarlos, consejos como: no aceptar solicitudes de desconocidos.

    Si educamos a los niños en un ambiente en el que el uso de las nuevas tecnologías sea algo corriente ya no tendremos que llegar a pasar un límite.

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  12. Yo opino que en la vida se debe actuar con unos conocimientos básicos y, a partir de ahí aumentar nuestros conocimientos a través de la experiencia o bien gracias a la búsqueda autónoma de la información. Con el uso de las nuevas tecnologías ocurre lo mismo. Los padres deben ofrecerle a sus hijos unos conocimientos básicos sobre el uso eficiente de una herramienta, en este caso, tecnológica. Al comienzo el/la niñ@ cometerá errores, a pesar de poseer los conocimientos básicos. Estos errores serán los encargados de perfeccionar el uso de dicha herramienta.
    Considero de la misma gravedad ambas actitudes extremistas, es decir, permitir a nuestr@ hij@ utilizar una herramienta de la cual desconoce sus peligros; y sobreproteger al hij@ en el uso de la herramiento, llegando incluso al punto del espionaje y a la falta de privacidad.
    Es cierto que las nuevas tecnologías permiten este espionaje con una mayor facilidad, pero no se debe caer en la tentación de usar esta técnica, ya que perjudica la vida de nuestr@ hij@.
    Miguel González Lorenzo.

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  13. esta claro que la viñeta es una caricatura de la vida real. Si nos centramos en la parte de la viñeta que habla sobre las nuevas tecnologías, esta claro que este tipo de situaciones puede pasar, los padres muchas veces por sobreproteccion espían a los hijos o crean situaciones inapropiadas. Creo que para evitar este tipo de situaciones y para evitar que los niños y niñas se encuentren en posición difícil, lo mejor es enseñar desde un principio a usar las nuevas tecnologías de manera adecuada y critica. Pero esto no va solo dirigido para el alumnado, si no para las familias, que en muchas ocasiones no saben manejar o discriminar adecuadamente la información que se encuentran. Hay que enseñar desde un principio, lo básico, enseñando tanto las ventajas como los peligros de internet, o de cualquier herramienta tecnológica que pueda ser utilizada de mala manera.

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  14. La pregunta que planteáis da mucho juego, ya que desde que las "nuevas" tecnologías están al alcance de todo el mundo se ven casos reales de posturas tan extremistas como las representadas en el dibujo.
    Yo opino que unos padres sí tienen que tomar parte en la interacción de sus hijos con internet y las nuevas tecnologías, pero solamente en la explicación a éstos sobre todos los peligros que tiene la red y ejerciendo una cierta supervisión, no siguiéndolos en toda red social y controlándolos mediante ellas, por lo que creo que un término medio en estos casos es la mejor opción, ya que si se recurre al extremo de controlarlo completamente puede terminar teniendo cierto rechazo contra la persona que se lo ejerza y sin embargo, si se recurre al otro extremo, el de dejarlo completamente libre, puede llegar a utilizar estas herramientas sin saber el riesgo que suponen y otorgar sus datos a extraños o creer todo lo que se puede llegar a leer en la red. Por ésto digo que ningún extremo es bueno, opino que lo más beneficioso es dejarle a los niñ@s cierta libertad advirtiéndolos siempre de todo lo que puede encontrase.

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  15. son dos ideas muy distintas, una cosa es controlar o espiar más o menos, y otra conocer más o menos del tema de los peligros que pueden darse y educar a los hijos en ello, en hacer un correcto uso de las redes. Considero que lo mejor es educar a los hijos, de tal manera que pueda dejarse cierta libertad y confianza depositada en ellos cuando éstos empiecen a moverse en ese mundo, pero en ningún momento está bien espiar o controlar a nadie, si así hicieran los padres, estarían faltando a valores fundamentales que se crean en el vínculo o relación padres/hijos, así como sobreprotegiendo de tal manera que sería imposible disimular sus visitas espías. Por tanto, su papel fundamental respecto a este tema es de buenos educadores, dando autonomía a sus hijos poco a poco.

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  16. Por parte del grupo de Los Anónimos, querríamos mostrar nuestro acuerdo con la mayoría de los comentarios de esta viñeta dado que las posturas mostradas estaban exageradas con la intención de que chocase con la auténtica opinión de los demás miembros de los blogs, así como que estos comentasen detalladamente la viñeta y su opinión con respecto al debate propuesto.

    En concreto nuestra opinión se posiciona de muy similar a la vuestra dejando cierta rienda a que los niños y niñas investiguen aprendan,pero siempre informando a los usuarios más jóvenes de Internet, sus hijos, de los peligros que alberga tanto las nuevas tecnologías como las redes sociales en este caso en particular.

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  17. Partiendo de que si su hijo se ha ido a Madrid solo, entiendo que como mínimo debe tener 18 años, por lo que, en mi opinión, y respondiendo a la pregunta planteada los padres y las madres no tienen por qué tener la necesidad de controlar a sus hijos mayores de edad, ya que éstos son responsables de sus actos. La respuesta cambiaria si se tratara de hijos menores de edad, en ese caso, si veo necesario un control por parte de los padres, pero nunca demasiado excesivo, el control debería centrarse en poner determinados filtros para que no puedan acceder a algunas páginas web de contenido no apto para su edad y enseñar a los hijos la forma correcta de navegar por la red.

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